Aquí encontrarás yacimientos de empleo, ideas de negocio, támites para la creación de empresas, e incluso algunos ejemplos de empresas ya creadas.
ÁNIMO, VAMOS A INTENTARLO
- GUIA PARA LA CREACIÓN DE EMPRESAS
- GUIA PARA EL PROYECTO DE EMPRESA
- PASOS A SEGUIR PARA CREAR TU PLAN DE EMPRESA
- CÓMO CREAR TU EMPRESA
- ¿CÓMO ELABORAR UN PLAN DE EMPRESA? TEORIA IMPRIMIR
- GUÍA BÁSICA DE APROXIMACIÓN A UN PLAN DE EMPRESA
- MANUAL PARA EL DESARROLLO DEL PLAN DE EMPRESA
- PLAN DE NEGOCIO. ESINE
- CASO PARADORES. GUERRAS Y NAVAS
- EJEMPLO EMPRESA CATERING
- MEMORIA PARADORES 2007
- CÓDIGO ÉTICO PARADORES- ORGANIGRAMA
TEMA
3: EL PLAN DE EMPRESA
Introducción
al plan de empresa
¿Qué
es?
El
Plan de Empresa es una herramienta de trabajo para aquellas personas o
colectivos que quieran poner en marcha una iniciativa empresarial
Es
un documento escrito por los promotores del proyecto y en él están recogidos
los diferentes factores y los objetivos de cada una de las áreas que
intervienen en la puesta en marcha de la empresa.
No
debe confundirse con una simulación de cuentas de documentos financieros
provisionales.
¿Para
qué sirve?
La
utilidad del Plan de Empresa es doble:
·
Internamente obliga a los
promotores del proyecto a iniciar su aventura empresarial, con unos mínimos de
coherencia, eficacia, rigor y posibilidades de éxito, estudiando todos los
aspectos de viabilidad del mismo. Además sirve de base para cohesionar el
equipo promotor del proyecto, permitiendo definir claramente los cargos y las
responsabilidades, y verificar que están de acuerdo acerca de los objetivos y
la estrategia a seguir.
·
Externamente es una espléndida
carta de presentación del proyecto a terceros, que puede servir para solicitar
soporte financiero, buscar socios, contactar con proveedores, Administraciones,
etc.
Además,
servirá de referencia para la acción futura de la empresa y como instrumento de
medida de los rendimientos alcanzados.
Es
muy importante que en la elaboración del Plan de empresa participen todos los
socios o promotores del proyecto. Esto garantiza la plena implicación de todos
en los objetivos de la empresa y en la manera de alcanzarlos.
¿Cómo
se estructura?
Cada
Plan de Empresa tiene su propia personalidad y, por tanto, puede organizarse de
formas diferentes, pero existen una serie de elementos y reglas comunes a todos
ellos.
Una
posible estructura de Plan de Empresa puede ser la siguiente:
0.
IDENTIFICACIÓN
DEL PROYECTO
1.
PLAN
DE MARKETING
2.
PLAN
DE OPERACIONES
3.
PLAN
DE RECURSOS HUMANOS
4.
PLAN
DE INVERSIONES Y UBICACIÓN
5.
PLAN
ECONÓMICO FINANCIERO
6.
ESTRUCTURA
LEGAL DE LA EMPRESA
7.
CALENDARIO
DE EJECUCIÓN
8.
RESUMEN
Y VALORACIÓN
9.
ANEXOS
¿Cómo
presentarlo?
Las
personas que tienen que leer un Plan de Empresa (entidades financieras,
posibles socios, proveedores, etc.) normalmente disponen de poco tiempo para
hacerlo, por ello, la parte principal del documento debe ser relativamente
breve, del orden de 20 a 40 páginas como máximo.
Todos
los elementos detallados formarán parte de anexos, los cuales suelen ser
bastante completos y sólo serán leídos por el lector interesado en ellos
(estudios de mercado, currículos, datos técnicos, documentos financieros,
etc.).
La
mayoría de los profesionales recomiendan respetar un cierto número de reglas:
·
Un
dossier principal breve y anexos:
breve resumen sobre las conclusiones del estudio de mercado, comentarios acerca
de los documentos financieros, presentación comprensible de los datos técnicos,
etc.
·
Un
resumen obligatorio, de una o dos
páginas. Se trata, en cierto modo, de un “folleto” o página de publicidad
con la cual el empresario trata de “vender” su empresa.
·
Se
aconseja realizar una presentación
estructurada, clara y concisa, cuidando los aspectos formales y escritos a
máquina o impresora.
Consideraciones
previas
La
puesta en marcha de una idea de negocio requiere realizar una serie de estudios
que contribuyan a identificar los aspectos que van a influir en el lanzamiento
y desarrollo futuro del proyecto empresarial.
Errores frecuentes:
1. Emprender
solo. Es recomendable emprender acompañado. Sólo así se accede a información
completa e importante, se minimiza la posibilidad de omitir u olvidar
cuestiones esenciales, y se pueden detectar carencias en diversas áreas.
2. Centrarse
en una sola idea. En ocasiones el emprendedor o emprendedora se centra en una
sola idea, tal y como la concibe en su cabeza, sin averiguar antes si existe
realmente mercado para ella. Investigar, analizar el mercado, los negocios ya
existentes, y ser capaz de trabajar o "pulir" esa idea, son aspectos
importantes que han de ser abordados ya en los primeros momentos. En ocasiones,
en este primer análisis de "pre- viabilidad" puede ocurrir que no sea
definitivamente recomendable el desarrollo de esa idea. En otras ocasiones,
basta modificar algún aspecto para poder comenzar a trabajar esa idea en un
Plan de Empresa.
3. No
formarse adecuadamente. Los conocimientos que la persona emprendedora tenga en
su área de actividad, generalmente distan de los conocimientos necesarios para
gestionar o dirigir una empresa. Es importante complementar la formación propia
con la formación en el área empresarial.
4. No
desarrollar un Plan de Empresa. Se cree erróneamente que el Plan de Empresa no
es necesario, si se tienen las ideas muy claras. Esta creencia lleva a cometer
errores como pueden ser el no encontrar la financiación necesaria, y algo que
es más frecuente de lo que se cree; "meterse en demasiado" o dicho de
otro modo, solicitar más financiación de la realmente necesaria.
En
definitiva, todo ese esfuerzo de búsqueda de información, de reflexión y de
planificación del negocio debe de quedar reflejado en un documento: el Plan de
Empresa. La elaboración del Plan de Empresa es una tarea que requiere tiempo y
esfuerzo, por ello siempre es recomendable para todo emprendedor/a que tenga
una iniciativa empresarial, acudir a
asesoramiento especializado.
Todos
los proyectos tienen elementos comunes y otros que los definen como singulares.
Por ello las pautas que se describen han de ser adaptadas a cada proyecto en
particular.
Al
final del proceso de elaboración del Plan de Empresa, el emprendedor/a debe
estar completamente convencido/a de las posibilidades de éxito de que dispone
teniendo siempre presente los riesgos y los puntos claves del proyecto.
ORGANISMOS DE APOYO A LOS EMPRENDEDORES Instituciones oficiales e instituciones empresariales - Administraciones públicas
Un vivero o centro de empresas que ofrece a bajo coste instalaciones y servicios de apoyo a la creación de empresas. Los viveros tienen como objetivo favorecer y apoyar las nuevas iniciativas empresariales innovadoras. Está dirigido a todos los emprendedores, con inquietudes de crear una empresa viable, que genere empleo y que aporte innovación en el terreno de la industria y las nuevas tecnologías. Es posible que la persona no tenga los conocimientos profesionales necesarios, pero esto puede solucionarse, bien preparándose en aquellas materias que no domina, bien buscando socios que complementen sus conocimientos, o también, acudiendo al asesora-miento de profesionales especializados (gestorías, consultorías, asesorías jurídicas, etc.). Los viveros ofrecen a los emprendedores oficinas amuebladas a bajo coste, salas de reuniones, salón de actos, servicio de reprografía y de comunicaciones. Además, los emprendedores cuentan con asesoramiento y apoyo técnico en el proceso de creación de la empresa, servicios de asesoría jurídica, fiscal, laboral y contable, así como asesoramiento empresarial en orientación de tu negocio, diseño de prototipos, protección intelectual e industrial de tus productos, promoción de la empresa, contratación de trabajares. Los viveros, normalmente disponen de un servicio de información empresarial en subvenciones y líneas de financiación, cursos de formación, ferias y misiones comerciales, legislación, información y noticias de interés para el emprendedor. ¿Cómo iniciar el Plan de Empresa? LA IDEA DE NEGOCIO Cualquier Plan de Empresa ha de empezar con una breve descripción de la idea que servirá de base al negocio. No deberá tener una extensión superior a una página. A título de ejemplo, este primer apartado deber dar respuesta a las siguientes preguntas:
La idea de negocio es el producto o servicio
que se ofrece al mercado, lo que quiero vender, el instrumento para atraer a
los clientes y obtener un beneficio económico. Por ello, la idea de negocio no
puede quedar en una aproximación indefinida, en un conjunto de ideas que no
están claras. La idea de negocio es tu principal argumento de venta.
La descripción
de la idea de negocio es la concreción de los siguientes elementos:
Descripción del producto o servicio
Todo negocio comienza con una idea, con
aquello que queremos vender. La idea se debe definir con criterios de claridad
y concreción (no más de 25 palabras). Una idea de negocio es, en primer lugar,
la descripción del producto (bien o servicio). Es una descripción en pocas
líneas de tu producto, resaltando las características más relevantes o aquellas
que lo diferencian de otros similares. Si posees más de un bien o servicio, diferencia
entre todos ellos, distinguiendo cuáles son los principales puntos fuertes de venta,
y cuáles son servicios auxiliares al producto o servicios principales.
Necesidad que satisface
La necesidad que satisface se refiere a los
problemas que resuelve a las personas que compren ese bien o servicio. Habrá
que hacerse la pregunta: ¿cuál es el interés que tiene el cliente en gastar
dinero por mi bien o servicio?. No existe idea empresarial buena si ésta no se
vende. La venta dependerá en gran medida de la necesidad que ese producto satisface,
así pues, hay que meditar realmente sobre cuál es esa necesidad.
Descripción del valor añadido
No es suficiente con tener un producto o
servicio a vender y un grupo de clientes que lo necesiten. Tienes que pensar si
existen otros productos similares en el mercado, bien por tener las mismas características físicas que
el tuyo, bien porque satisfacen la misma
necesidad. En este caso, tienes que
preguntarte, ¿por qué comprarán mi producto y no otro? ¿Por qué dejarán de
comprar a la competencia para comprarte a tí? La respuesta a esta pregunta es
tu valor añadido, los elementos que te diferencian de la competencia y te hacen
ser mejor que ellos.
¿Quiénes pueden ser tus clientes?
En todo este desarrollo se ha mencionado
insistentemente al cliente. Y es así ya que se trata del punto clave de la
gestión empresarial, y sus intereses, actitudes y hábitos de compra definirán
las características de tu producto y la estrategia de venta. Aquí tienes que
definir al cliente ¿quiénes pueden ser los clientes? ¿son personas individuales
u organizaciones? ¿Tienen características específicas en cuando a edad, sexo,
profesión, capacidad económica, tamaño, etc.? Estas cuestiones las veremos más
profundamente en otra fase del estudio de mercado, pero es bueno ir avanzando
aquellas características que son esenciales de los consumidores.
¿Existen otros productos similares
en el mercado?
La competencia es otro elemento sobre el que
se va a hablar mucho a lo largo del estudio de mercado. De la competencia
debemos obtener los métodos que utilizan, el producto que ofrecen, las
estrategias de venta, etc. El objetivo es conocer tu producto frente a los demás
que ofrecen, pero también copiar todas aquellas estrategias exitosas. En el mercado,
pues, debemos trabajar por un lado para diferenciarnos de los demás, y por otro
lado, para armonizar o equilibrar todos sus puntos fuertes.
FUENTES DE IDEA DE NEGOCIO
Las ideas de negocio
son fuentes para descubrir verdaderas oportunidades de negocio. Las
ideas de negocio derivan generalmente de una o varias de las siguientes
fuentes:
¿QUIENES SON LOS PROMOTORES DE LA EMPRESA? Un proyecto empresarial está ligado estrechamente a la personalidad y a la preparación de sus promotores. El plan de empresa debe destacar los coocimientos, que sobre el negocio, disponen los promotores, su preparación técnica o su experiencia en el sector. Es imprescindible incluir un currícullum vitae.
Identificación
de los promotores. Datos personales :Constará en este
apartado el nombre y los datos personales de los promotores del proyecto (nombre, N.I.F.,
domicilio,…)
Breve
historial profesional de los promotores :Este punto es
fundamental de cara a otorgar credibilidad a un proyecto, ya que los inversores quieren
saber si el equipo directivo es capaz de llevar a cabo el negocio.
Debe incluirse en el mismo referencias a:Grado de dedicación futura al proyecto: En este apartado se indicará el grado de implicación que tendrán los promotores en el desarrollo del proyecto, pues es bien valorado que los que promueven una idea empresarial colaboren en el progreso de la misma. ¿Cuáles serán las características básicas d ela emrpesa?
Para
que una empresa pueda llevar a cabo su actividad, necesita disponer de un edificio, nave o planta de producción
si se trata de una actividad industrial, o de un local si se trata de una
actividad comercial o de servicios. Es decir, necesita elegir un espacio físico
donde instalar los factores necesarios para producir.
Respecto
al emplazamiento de la futura empresa habrá que decidir dos cuestiones
importantes y que van a condicionarla durante un largo periodo de tiempo:
¿Dónde
instalar la empresa? ¿Es lo mismo instalarla en el centro urbano que en las
afueras de una ciudad, o en el interior que cerca de un puerto de mar? Sin
duda, elegir un lugar u otro para localizar la empresa va a influir no sólo en
qué lugar tengamos unos costes mayores o menores, sino también en que tengamos
una mayor o menor demanda.
¿Qué
dimensión debe tener la empresa? ¿Es mejor constituirse como una empresa
pequeña, mediana o grande? ¿Qué ventajas e inconvenientes se derivan de adoptar
un modelo u otro?
Ambas
decisiones están relacionadas, ya que dependen en gran medida de un factor
común: la demanda esperada o demanda prevista.
Una
vez detectada una oportunidad de mercado, la empresa elegirá una dimensión en
función de cuántos clientes se prevean; a su vez, tratará de situarse cerca de
donde se encuentren esos clientes. Dimensión y localización son, por tanto,
decisiones que se deben tomar conjuntamente.
Por
último, la importancia de la elección varía según el tipo de actividad de la
empresa. No obstante, en todos los casos deben ser decisiones meditadas, ya que
cualquier error puede perjudicar el desarrollo futuro de la empresa. Esto es
así porque se trata de decisiones estratégicas (a largo plazo) que requieren
una inversión considerable y, una vez puestas en práctica, no es fácil
corregirlas sin que se produzcan costes irrecuperables.
A.
LOS FACTORES DE LOCALIZACIÓN
En
el análisis de las distintas posibilidades, las empresas estudian sus factores
de localización, es decir, el conjunto de circunstancias que aconsejan un
determinado lugar para su instalación.
Los
factores de localización son diversos y la incidencia de cada uno de ellos
variará según las características concretas de la actividad de la empresa.
A.1
FACTORES DE LOCALIZACIÓN INDUSTRIAL
Como
criterio general, la localización óptima de fábricas, almacenes y plantas será
aquella en la que los costes totales de producción sean menores.
Por
tanto, la empresa debe analizar todos aquellos factores cuyos costes varían en
función del lugar concreto en que se instale. Los más importantes son:
La disponibilidad y el coste del terreno. Este factor será más determinante para aquellas empresas que requieren grandes superficies para su instalación (petroquímicas, fabricantes de automóviles, etc.), que tienden a localizarse alejadas de los núcleos urbanos, en zonas donde el suelo es más barato. La existencia de mano de obra cualificada. Interesará que en la zona elegida existan suficientes trabajadores cualificados para cubrir los distintos puestos de trabajo de la empresa. Además habrá que tener en cuenta que el coste de la mano de obra también varía de unas zonas a otras. La dotación industrial y las infraestructuras. Debe considerarse el nivel industrial de la zona y la existencia de otras empresas auxiliares (fabricantes de componentes necesarios para el proceso productivo, servicios de asistencia técnica, etc.). En el caso de las plantas industriales, su instalación deberá efectuarse en zonas calificadas como de uso industrial (polígonos y parques industriales, parques empresariales o tecnológicos), dotadas de las necesarias infraestructuras de servicios (energía, agua, telecomunicaciones, saneamiento y eliminación de residuos, asesoría, hostelería, etc.). Transportes y comunicaciones. La cercanía a redes de comunicaciones con el resto del territorio (carreteras, puertos, ferrocarril, etc.), así como la disponibilidad de medios de transporte, son también factores importantes. Existencia de ayudas económicas o fiscales. Para promover la instalación de empresas en determinadas zonas, la Administración concede determinadas ventajas económicas y fiscales que deben aprovecharse. Otros factores. El desarrollo económico y social de la zona, el ambiente de negocios imperante en la región o el clima laboral y social existente (la actitud de los trabajadores y de los sindicatos) también deben tenerse en cuenta.
A.2
FACTORES DE LOCALIZACIÓN COMERCIAL Y DE SERVICIOS
Los
comercios, hoteles, bancos y otras empresas de servicios se preocupan, sobre
todo, de asegurar que sus productos o servicios sean fácilmente accesibles para
sus clientes.
En
concreto, los factores de localización de este tipo de empresas son:
La proximidad a la demanda. Estar cerca de los potenciales clientes es determinante. Así, para la instalación de un restaurante de lujo se buscará una zona en la que el poder adquisitivo sea alto. Los colegios e institutos se construyen cerca de donde viven los alumnos. Una residencia universitaria debe estar próxima al centro universitario o tener fácil acceso de comunicaciones, etc. Visibilidad del local. Como factor complementario del anterior, es importante situarse en zonas de alto poder de atracción para el cliente o en lugares estratégicos que resultan más visibles. Son preferibles los locales con grandes fachadas, situados en calles peatonales y centros comerciales, en zonas de gran tránsito peatonal, en plazas céntricas, etc. El coste del local. Hay que considerar el precio del local y lo que va a costar acondicionarlo. Los locales mejor situados suelen ser los más caros, pero proporcionan una mayor rentabilidad que otros más baratos pero peor situados. Facilidad de comunicaciones y comodidad de acceso. Es fundamental que el lugar elegido sea de fácil acceso para los usuarios a través del transporte público o tenga facilidades de aparcamiento, etc. la comodidad para aparcar condiciona la localización, sobre todo en las grandes ciudades. Así, la creciente congestión urbana y las dificultades para aparcar favorecen que los consumidores hagan sus compras en las grandes superficies por su facilidad de aparcamiento y la comodidad para cargar el coche. La complementariedad de actividades. Son cada vez más atractivos los puntos de localización en los que existan ofertas de servicios complementarios, como las grandes superficies y los centros comerciales.
A.3
NUEVAS TECNOLOGÍAS Y LOCALIZACIÓN
Las
nuevas tecnologías de la información y la comunicación están cambiando el
concepto de espacio físico de empresa. El comercio electrónico o los servicios
en línea, las nuevas necesidades sociales (atención a la tercera edad,
servicios a la familia, etc.), mensajería, multiasistencia, etc., están
revolucionando el concepto tradicional de localización, aproximándolo más a una
centralita telefónica o a un lugar en la red que a una oficina o local
comercial.
B.
LA DIMENSIÓN DE LAS EMPRESAS
La
dimensión o tamaño de la empresa hace referencia a su capacidad productiva o
máximo nivel de producción alcanzable en un periodo de tiempo.
Elegir
la dimensión de una empresa es una decisión estratégica que condiciona la
estructura empresarial durante un amplio período de tiempo. Esta decisión viene
determinada por la demanda prevista, es decir, el objetivo de la dimensión de
una empresa es satisfacer, de la manera más eficiente y en el momento oportuno,
la cantidad de producción requerida por el mercado. Por ello, aunque se trata
de una decisión que afecta a la estructura de la empresa, debe ser siempre
revisable en la medida en que puedan producirse cambios en la demanda.
No
obstante, al hablar de dimensión conviene delimitar a qué unidad nos referimos:
no es lo mismo hablar de dimensión global de la empresa, integrada muchas veces
por varias unidades productivas (fábricas, almacenes, puntos de venta, etc.),
que hacer referencia al tamaño de una instalación productiva concreta. Por
ejemplo, una gran empresa textil tiene múltiples plantas de fabricación y
almacenamiento distribuidas por diversos lugares. Por tanto, conviene
distinguir lo que es la dimensión de la fábrica o explotación, de la dimensión
total de la empresa.
Asimismo
conviene diferenciar la dimensión o capacidad productiva de la empresa con la
capacidad realmente utilizada, es decir, con su ocupación de hecho. Así, un
hotel puede tener capacidad para alojar a 100 clientes diarios, pero si solo se
alojan 80, diremos que su ocupación es del 80%, es decir, está por debajo de su
capacidad o, lo que es lo mismo, existe una capacidad ociosa del 20%.
Por
último, decir que los criterios más utilizados para medir la dimensión ya se
comentaron en la unidad 2, recordad: nº de trabajadores, volumen de ventas o
ingresos, volumen de producción, en base al neto patrimonial, al activo total o
por los beneficios netos anuales.
PRODUCTOS QUE COMERCIALIZARÁ LA EMPRESA 1.-Según sus características - a) Bienes - b) Servicios 2.- Según su finalidad
- a) Productos de cosnumo: duraderos y fungibles
- b) Productos industriales: Materias primas, componentes, equipos de producción
CALENDARIO DEL PLAN DE EMPRESA
Es preciso contar un un temporalización de las diversas actuacines del proyecto, identificando en cada caso de qué etpa del proyecto se trata, quién se encargará de ejecutarla y la duración prevista.
En este apartado se trata simplemente de fijar el calendario de todas
las actividades que el emprendedor ha de realizar para poder lanzar y
poner en marcha el Plan de Actuación.
Para hacerlo es necesario tener a la vista todos los planes elaborados anteriormente para asegurar que todos los aspectos significativos se incorporen al Calendario. Un posible esquema para el Calendario, que incorpora algunos elementos de apoyo podría ser el siguiente. ( descargar posible esquema) Para ayudarle a elaborar cronogramas, existen herramientas sencillas que le permitirá modificar los datos cuando y como quiera, como visualizar gráficamente las evoluciones y posibles escenarios. Ejemplo de representación gráfica de un planing (diagramd de Gantt). CONTINUACIÓN
Identificación
del proyecto
La
empresa surge de una Idea, requiere la presencia de un Promotor/a,
emprendedor/a o empresario/a, y se desarrolla en un Entorno determinado. En la
Identificación de proyecto por tanto, se trata de realizar una breve
descripción de la actividad y de la historia de su proyecto desde los inicios,
analizando el grado de desarrollo en el momento actual.
Los
aspectos a abordar son:
·
La actividad: describir la
actividad objeto de su proyecto y los pasos que ha dado hasta ahora para su
desarrollo. Especificar si está o no iniciado. En el caso de que lo esté,
explicar el proceso seguido hasta ahora.
·
Evolución del
proyecto:
orígenes y actualidad: se trata de hacer un breve resumen de la evolución del
proyecto, es decir, qué causas le han empujado a poner en marcha su idea y qué
contactos ha realizado.
·
Valoración global del
proyecto:
puntos fuertes y coherencia; describir de forma clara y breve el conjunto del
proyecto, resaltando los aspectos positivos, los puntos fuertes y la coherencia
entre todas las áreas de gestión
El
Proyecto
Se
indicarán los datos de identificación de la empresa, tales como: nombre,
domicilio, NIF, teléfono, fax, capital social, nombre de los principales
socios, actividad, etc.
La
Idea
Se
indicará aquí cómo surgió la idea de negocio y/o qué necesidad se detectó.
equipo
El
Equipo promotor
Llegados
a este punto ya hemos reflexionado sobre las capacidades y carencias propias.
Conviene
por tanto, en este apartado, reflejar capacidades y potencialidades
(experiencia, formación, afán de superación, etc) del equipo promotor.
El
Entorno
Partiendo
de que la empresa actúa en un entorno que cambia continuamente y, en general,
cada vez más deprisa, es necesario tratar de predecir estos cambios y evaluar
la interrelación de los mismos con nuestra empresa, en relación a los ámbitos
siguientes:
·
Sociales: crecimiento de la
población, variación de la distribución por edades, nivel educativo y cultural,
etc.
·
Económicos: estructura
productiva, productividad, renta per cápita y distribución de la misma, etc.
·
Tecnológicos: infraestructuras
tecnológicas, departamentos universitarios, centros de I+D, etc., que puedan
ofertar o tener relación con la actividad de la empresa.
·
Institucionales: instituciones,
medidas de política económica, situación de las relaciones internacionales,
etc.
Plan
de Marketing
En este apartado se
trata de dar respuesta a estas preguntas: ¿qué vender? ¿a quién? ¿a qué precio?
¿con qué medios? ¿cómo? ¿cuánto?. La respuesta a estas preguntas determinará
decisivamente el Plan de Empresa en su conjunto y la propia configuración de la
empresa. El plan de marketing ha de servir de punto de referencia para comparar
su producto o servicio con otros similares que se encuentren en el mercado y
destacar los aspectos innovadores/competitivos del suyo.
Delimitación previa
del negocio
En este apartado se trata de describir, por
un lado, cuál es el producto/s o
servicio/s a cuya producción va a dedicarse su empresa. Por otro lado, cuál
es importante que se señale a qué segmento de mercado va dirigido y qué necesidades demandadas por este sector
quedan cubiertas
Se entiende por producto cualquier bien material dotado de un valor para el
consumidor/a o usuario/a y susceptible de satisfacerle una necesidad o
proporcionarle una utilidad. Un producto puede ser comprado por un particular o
empresa con vistas a su consumo final. Se trata, en este caso, de un producto
de consumo, pudiendo ser, según su duración, perecedero (ej: pan, fruta, leche,
etc.) o duradero (ej: automóviles, electrodomésticos, etc).
También puede comprarse el producto por una
empresa u organización para incorporarlo a sus procesos productivos, usarlo en
sus operaciones corrientes o, simplemente, revenderlo. El producto se
denominará, en este caso, producto industrial (ej: materias primas, maquinaria,
etc).
Por su parte, se entiende por servicio la aplicación de esfuerzos
humanos o mecánicos a personas, animales u objetos. A diferencia de un
producto, un servicio se caracteriza por su intangibilidad y por el hecho de
ser perecedero y no poderse almacenar.
Como en el caso de un producto, existen
servicios de consumo (ej: una consulta médica, un viaje en autobús, etc.) y
servicios industriales y empresariales (ej: servicios financieros a empresas,
servicios de investigación, asesoramiento en general, etc).
Finalmente, hay que tener en cuenta que la producción
de bienes y servicios no es excluyente dentro de una misma empresa, sino que es
relativamente frecuente la prestación de servicios asociados a los productos
fabricados (ej: servicios de seguros y de reparaciones asociados a la venta de
un automóvil, etc).
Por otro lado, el mercado se encuentra determinado por la existencia de un conjunto
de personas físicas y/o jurídicas, que sienten la necesidad de disponer de un
producto o servicio determinado, desean o pueden desear comprarlo y tienen
capacidad para hacerlo.
Un mercado presenta unos límites de distintos
tipos, que es conveniente conocer. Dichos límites pueden ser físicos (ej:
territoriales o geográficos), según las características de los consumidores
(ej: demográficos, socioeconómicos, culturales, etc), según los diferentes usos
del producto o servicio (ej: los usos alternativos de un producto en sí o
derivados de la existencia de posibles productos complementarios, etc.)
Es importante que defina hacia dónde se
dirigirá geográficamente la oferta de su producto/servicio, teniendo en cuenta
cuales son las posibilidades de las zonas geográficas elegidas, si en estas
zonas tendrá salida el producto/servicio, y por qué. Analizar si está ante un
mercado en expansión o en decadencia, si está ante un sector fragmentado o
concentrado, o si nuestro producto o servicio está creando un nuevo sector. Se
deberá incluir un análisis de los futuros clientes, compradores, consumidores
del producto/servicio.
Asimismo es necesario distinguir entre un
mercado potencial (al que puede dirigirse la oferta comercial de la empresa o
conjunto de posibles clientes de la misma), un mercado objetivo (al que se
dirige efectivamente dicha oferta, pudiendo coincidir o no con el mercado
potencial) y un mercado real (formado por los demandantes de un producto o
servicio determinado y en un momento dado).
Por último conviene definir con exactitud ya
desde este momento la actividad a desarrollar, identificándola en la
Clasificación Nacional de Actividades Económicas, CNAE-93 y/o en el Impuesto de
Actividades Económicas I.A.E. correspondiente.
Información
y análisis de la situación
El objeto de este apartado es organizar y
sistematizar la información necesaria para completar el conocimiento y
descripción del negocio, tanto del conjunto del sector en el que se va a
desarrollar la actividad (información externa), como del proyecto o empresa
individual (información interna).
Esta información permitirá analizar
oportunidades y amenazas del entorno, fuerzas y debilidades de la empresa,
proyectar la evolución del mercado y del entorno y establecer los objetivos y
las estrategias del marketing mix.
Información externa o del mercado
Información del conjunto del sector en el que
se va a desarrollar la actividad: Demanda, Clientes y Competencia.
Demanda:
1.
Es
preciso conocer cuál es la necesidad que se pretende cubrir, y destacar aquélla
que no es cubierta por otro producto o servicio: ¿Qué necesidad? ¿Por qué, en
qué momento y dónde se satisface? ¿Cómo? ¿Qué necesidades no cubre?
2.
Cuantificar
el volumen de mercado (real y potencial). Si el producto no es nuevo, ha de
evaluarse el momento real (número de productos que se venden al año, cantidad
total e importe). Si es muy nuevo, hemos de buscar referencias de productos
sustitutivos o similares. También hay que considerar el mercado potencial (es
decir, el número de clientes y el volumen de ventas que teóricamente es posible
alcanzar). Para considerar el mercado potencial debe recurrir a variables
demográficas y sociales.
3.
Identificar
en qué etapa del ciclo de vida del producto o servicio (conjunto de fases o
etapas que transcurren desde su lanzamiento al mercado hasta que es retirado
del mismo; suelen identificarse cuatro etapas que son introducción,
crecimiento, madurez y declive) se encuentra el mercado del producto o servicio
que va a ser ofrecido por la empresa ya que en cada una de las diferentes
etapas varía el comportamiento de las ventas, de los resultados y de la
actuación de la competencia, por lo cual debe seguirse una estrategia distinta.
4.
Señalar
la distribución geográfica del mercado real a partir del reparto de volumen de
ventas en diferentes zonas (ciudades, provincias, regiones o países) y canales
de distribución. si el mercado que se pretende (público objetivo) tiene
características especiales como las siguientes: estacionalidad (si es un
mercado con fuertes desequilibrios de ventas en determinados periodos del año,
reglamentación lega (si existen importantes límites legales respecto a la
actividad empresarial), ritmo del cambio tecnológico (si se trata de un mercado
en el que los nuevos productos quedan obsoletos con gran rapidez) y
obligatoriedad de canales (canales de distribución casi obligatorios, es decir,
si el producto o servicio va verse fuertemente condicionado en su proceso de
comercialización por un canal de distribución inevitable que impone su ley).
Clientes: Los negocios se
realizan entre personas. Son ellas las que los hacen vivir y crecer si se les
ofrece un producto o servicio que cubra las necesidades insatisfechas. Para
nuestro análisis es necesario:
1.
Segmentar
el mercado (dividiéndolo en grupos diferenciados según características
específicas–socioeconómicas, territoriales, personalidad-,..)
2.
Analizar
motivaciones de compra que afectan a los distintos clientes (moda, interés
económico, comodidad, seguridad, atractivo,...) y analizar y explicar el por
qué, cómo, cuándo toman sus decisiones de adquirir un producto, y dónde y
cuánto compran.
3.
Obtener
información acerca de cómo se toman las decisiones de compra. Las personas
primeron se informan, después contactan y, finalmente, adquieren y, según sea
el peso económico del bien con respecto a sus rentas, tomarán una decisión más
inmediata, sopesando el riesgo de la compra o bien actuando por impulso, pero
siempre valorando la confianza que el producto les ofrece, su precio y su
imagen, valoración que puede ser individual o mediatizada por recomendaciones o
influencias.
Competencia: resulta necesario
analizar la competencia considerando los aspectos siguientes:
1.
Los
segmentos del mercado a los que se dirige.
2.
Tiempo
que lleva en el mercado, su nivel de éxito y qué estrategias de márketing le
han permitido alcanzar dicho éxito.
3.
Sus
políticas de precios, producto, distribución y promoción.
Aunque parezca paradójico, al iniciar un
negocio sin competencia resulta muchas veces más arriesgado que empezar
enfrentándose a la existencia de competidores. Cuando otros se han abierto
camino en un sector determinado, el que llega después tiene un camino más
"trillado". Además puede comparar, analizar las ventajas e
inconvenientes que tiene el negocio del vecino, sus estrategias de éxito, sus
puntos débiles, etc, ...y salir al mercado ofreciendo algo mejor y más
competente.
Es importante saber elegir a los
competidores. Es decir, determinar a cuál o cuáles de ellos se va a enfrentar.
Desde este punto de vista, abrir un negocio constituye una contienda. El
objetivo no es destruir al contrario, pero sí arrebatarle cuota de mercado.
Optar por enfrentarse al competidor más débil
no suele traer resultados positivos. Funciona mejor tomar en consideración al
más fuerte, al mejor, ya que así se peleará - se consiga o no- por llegar a ser
los primeros, los mejores.
Para cada uno de estos aspectos, en
definitiva, habría que establecer una comparación con el proyecto de empresa,
destacando así si está en una situación fuerte o débil respecto de la
competencia. Estudiar si existen factores que puedan influenciar en la actual
estructura de mercado, nuevas tendencias de la industria, factores
socioeconómicos, nuevas regulaciones administrativas, tendencias demográficas,
etc.
Información interna o del proyecto/empresa
En este apartado se trataría de definir la
postura que adoptará la empresa en la sociedad, lo que quiere hacer y los
medios que considera utilizables para ello. Para el supuesto de empresas de
nueva creación el análisis interno se limita al análisis del emprendedor/a o
emprendedores (ya comentado) y a la identificación y fijación de los siguientes
puntos:
Para empresas de nueva creación: análisis del
emprendedor y la definición de:
1.
Vocación
o misión de la empresa: razón o causa de su existencia. Es la función que ésta
pretende realizar dentro de la sociedad.
2.
Objetivos
generales de la empresa: son aquellos objetivos que ésta se plantea alcanzar a
largo y a muy largo plazo. Se trata de ver hacia dónde quiere ir o a dónde
quiere llegar la empresa.
3.
Ética
de la empresa: es la declaración de los medios que ésta considera utilizables
para conseguir los objetivos generales propuestos de acuerdo con su misión.
Define su forma de actuar de la empresa.
Para empresas en funcionamiento, se deberá,
además, realizar un análisis exhaustivo de la situación actual de las distintas
áreas de la empresa y sus recursos con el objeto de identificar más adelante
los puntos fuertes y débiles de ésta:
1.
Humanos:
necesidades de personal de las distintas áreas o departamentos funcionales de
la empresa, tanto en cuanto al personal directivo como al de los diferentes
departamentos que la integran (ventas, I+D, administración, etc.)
2.
Financieros:
composición de los recursos financieros de la empresa, indicando la cuantía y
origen de capitales propios y ajenos, que está en condiciones de obtener para
financiar su proyecto.
3.
Conocimiento
o Know-How: nivel de conocimientos (en definitiva "saber hacer")
existente dentro de las distintas áreas funcionales de la empresa, como la de
producto, la de proceso, la comercial, la organizativa, etc.
4.
Otros
recursos materiales; en este apartado se trata de que indique cuáles son las
disponibilidades de su empresa en cuanto a otros recursos materiales no
incluidos en los tres apartados anteriores, así como las posibilidades de
acceso y localización con que cuenta su empresa respecto de otros recursos
materiales, tales como materias primas, aprovisionamientos, bienes de equipo,
incentivos locales y regionales, facilidades administrativas y de tramitación,
etc.
Análisis
D.A.F.O.
Llegado a este punto el emprendedor/a deberá
realizar el análisis de los puntos fuertes y débiles de la empresa, así como de
las oportunidades y amenazas con las que se va a encontrar para el ejercicio de
su actividad:
·
Oportunidades:
son situaciones del entorno que permiten mejorar la situación competitiva de la
empresa si son aprovechadas.
·
Amenazas:
son situaciones que, si no se afrontan adecuadamente, pueden situar a la
empresa en peor situación competitiva.
·
Puntos
fuertes, fortalezas o fuerzas de una empresa: son aquellos aspectos de la misma
que suponen una ventaja comparativa frente a las demás empresas competidoras
del sector.
·
Puntos
débiles o debilidades de una empresa: son aquellos aspectos que suponen una
desventaja comparativa frente a esas mismas empresas competidoras.
Objetivos
En este apartado se trata de que indique
cuáles son los objetivos que, en términos generales, se plantea conseguir con
el plan de marketing. Los objetivos deben ser:
·
Adecuados
a la misión, metas y a la ética de la empresa.
·
Claros.
·
Medibles.
·
Viables
(los objetivos imposibles carecen de sentido).
·
Aceptables
para las personas que deben lograrlos.
·
Flexibles
ante la posibilidad de cambios imprevistos.
·
Un
reto para quienes tengan que conseguir su realización.
Asimismo, las personas implicadas en dichos
objetivos deben participar en su fijación y comprometerse con ellos. Por último
los objetivos pueden ser cuantitativos (cifra de ventas) y cualitativos
(posición competitiva, imagen, notoriedad, marca..):
·
O. Cuantitativos: en este apartado se deben fijar aquellos
objetivos que son mensurables cuantitativamente, es decir, el establecimiento
del volumen de ventas que se prevé conseguir, la cuota de mercado, la
rentabilidad, la penetración, el grado de cobertura de la distribución así como
los incrementos anuales para los años que se recogen en el plan.
·
O. Cualitativos: se deben también fijar aquellos objetivos
que por su mayor intangibilidad no son fácilmente mensurables, refiriéndose a
conceptos como la posición competitiva que pretende alcanzar
Estrategias
En este apartado se trata de definir las
estrategias de marketing que se propone seguir la empresa.
Se entiende por estrategia el modelo de
decisión que revela las misiones, objetivos o metas de una empresa, así como
las políticas y planes que resultan esenciales para su consecución, de tal
forma que se encuentre definida su posición competitiva, se sepa en que clase
de negocio está o quiere estar la empresa y qué clase de organización quiere
ser.
La formulación de una estrategia competitiva
consiste en relacionar a la empresa con el medio ambiente en el que está
ubicada y comprende además, una acción tanto ofensiva como defensiva,
encaminada a la consecución de una posición defendible frente a las fuerzas
competitivas del sector en el que se encuadra y al logro de un rendimiento
óptimo sobre la inversión realizada en la empresa. (Se recomienda hacer un
pequeño "análisis de las cinco fuerzas" propuestas por Porter para
estudiar el atractivo del sector en donde se enmarcará la empresa).
A pesar de la existencia de múltiples
definiciones del concepto de estrategia, todas ellas presentan en común los
siguientes rasgos o características:
·
La
estrategia constituye un proceso de naturaleza interactiva entre la empresa y
su entorno.
·
La
estrategia implica el planteamiento dentro de la empresa de objetivos y
misiones a largo plazo, entendiendo como tal, aquel horizonte al cual como
máximo puede llegar a su sistema de decisión.
·
La
estrategia, en consecuencia, debe establecer las políticas y objetivos a corto
plazo, de carácter inmediato y operativo, adecuando consiguientemente los
medios necesarios. La estrategia persigue la defensa y mejora de la
competitividad de la empresa, para lo cual puede incluso cuestionar la
naturaleza y la estructura de la propia empresa y de sus explotaciones
económicas o unidades de negocio.
La formulación de las estrategias de la
empresa puede plantearse por niveles o etapas, siendo los dos principales la
Estrategia corporativa o global, y las Estrategias de marketing, es decir:
Estrategia
corporativa o global
Toma a toda la organización como marco de
referencia y busca establecer sus objetivos o misiones a largo plazo, así como
la forma más adecuada de lograrlos. Pueden ser:
1.-
Estrategia genérica:
las principales estrategias genéricas seguidas por las empresas en función de
los objetivos que pretenden alcanzar son tres:
·
estrategia de Liderazgo en costes: consiste en vender
los productos o prestar los servicios al precio posible más próximo a su coste,
el cual, a su vez, será el más reducido posible para lograr una rentabilidad
positiva. Ello servirá para atraer nuevos compradores o usuarios y potenciar
las ventas de la empresa, la cual tenderá a ocupar una posición dominante en el
mercado.
Existe una serie de factores que posibilitan
el desarrollo de una estrategia de Liderazgo en costes, siendo los principales
factores los siguientes:
o
Firmar
contratos con los proveedores de materias primas y demás inputs de la empresa
que aseguren el suministro en las condiciones más ventajosas que sea posible.
o
Utilizar
la tecnología más eficaz que se encuentre en el mercado, a fin de obtener las
máximas economías de escala que sean factibles.
o
Desarrollar
procesos de fabricación propios que, por medio de la adaptación a la situación
particular de la empresa, posibiliten la reducción de costes.
o
Desarrollar
procedimientos o formas propias de distribución, comunicación, etc.
o
Firmar
contratos con clientes mediante los cuales la empresa pueda asegurarse un nivel
mínimo de ventas.
·
estrategia de Diferenciación: supone que la
empresa se especialice en algún aspecto concreto que la haga única y que sea
valorado por la totalidad del mercado: liderazgo, calidad, tecnología,
innovación, servicio, etc. En este caso, los principales factores que
posibilitan llevar a cabo una estrategia de Diferenciación son los siguientes:
o
Utilizar
técnicas de producción o tecnologías diferentes y lo más flexibles que sea
posible.
o
Utilizar,
en la medida de lo posible, procesos productivos que permitan la introducción
de adaptaciones y mejores en los productos o servicios.
o
Conceder
importancia a aspectos del producto o servicio como pueden ser el diseño, la
presentación, etc.
o
Resaltar
la calidad del propio producto o servicio frente a la de sus competidores.
o
Destacar
la posibilidad de usos alternativos o utilidades secundarias de los productos o
servicios, así como la posible existencia de otros complementarios.
·
estrategia de Especialización: consiste en la
división del mercado en subgrupos homogéneos (segmentación) de acuerdo con sus
características, comportamientos o necesidades, para así llevar a cabo una
estrategia comercial diferenciada para cada uno de ellos, lo cual permitirá
satisfacer de forma más efectiva sus necesidades y alcanzar los objetivos
comerciales de la empresa. Los principales factores que posibilitan desarrollar
una estrategia de Especialización o segmentación son los siguientes:
o
Emplear
procesos productivos lo más flexibles posible.
o
Utilizar
tecnologías y procesos de fabricación que no necesiten unos niveles mínimos de
producción elevados para ser rentables.
o
Utilizar
asimismo procesos o formas de distribución, comunicación, etc., que puedan ser
rentables sin necesidad de tener un mínimo de producción o de ventas demasiado
alto por cada referencia del producto o servicio.
2.-
Estrategia de cartera: Para definir la estrategia de cartera es aconsejable
utilizar la "matriz de Ansoff" o "matriz de dirección de
crecimiento", ya que es una herramienta útil especialmente para las pymes.
La matriz ayuda a decidir la línea estratégica de crecimiento de la empresa a
seguir para los años siguientes. Hay cuatro estrategias diferenciadas de crecimiento:
o
De
penetración del mercado.
o
De
desarrollo de nuevos productos.
o
De
desarrollo de nuevos mercados.
o
De
estrategia de diversificación.
Si bien es una matriz pensada para ser
utilizada por empresas ya en funcionamiento y con productos y/ o servicios en
el mercado, para empresas de nueva creación es interesante empezar a planificar
de acuerdo a este modelo el crecimiento de los años siguientes al del comienzo
de la actividad.
Estrategias de
Marketing
Tomando como base las estrategias corporativas,
busque la forma de aplicar los esfuerzos y dirigir los recursos dentro de las
distintas áreas funcionales de la empresa para conseguir maximizar la
productividad.
Estrategia de
segmentación:
realice una segmentación del mercado al cual pretende servir su empresa, es
decir, se trata de establecer los segmentos en que se va a dividir el mercado
de la empresa (que pueden ir desde un único segmento, que abarcaría a todo el
mercado, hasta el número que el emprendedor o emprendedora considere oportuno
diferenciar de acuerdo a las variables de segmentación que se utilicen). Con la
segmentación lo que se pretende es encontrar grupos de consumidores o usuarios
lo más parecidos posible dentro de un mismo grupo y lo más distintos posible
entre diferentes grupos, para así adecuar las políticas comerciales a llevar a
cabo a los gustos, hábitos o necesidades de cada uno o de alguno de los
segmentos diferenciados.
Para que una segmentación sea efectiva son
necesarias una serie de condiciones:
o
Cada
grupo ha de tener percepciones diferentes respecto del producto o servicio
o
Ha
de ser posible determinar qué consumidores o usuarios pertenecen a cada grupo y
qué preferencias tienen.
o
Se
han de poder adaptar las estrategias de producto o servicio, precio,
distribución y comunicación a las características de cada segmento.
El potencial de ventas de cada segmento debe
ser lo suficientemente importante como para compensar y hacer rentables los
costes de adaptación de las distintas políticas a ese segmento. Los segmentos
no deben ser tan cambiantes a lo largo del tiempo que no sea posible adecuarse
a sus necesidades en cada momento.
Después indique para cada uno de los
segmentos señalados su dimensión (potencial de ventas existente en el segmento
para su producto o servicio), los criterios significativos (son las
características que tiene un segmento y que son comunes para sus integrantes a
diferencia de los restantes grupos, que carecen de ellas), y los beneficios
identificados para el mismo.
Algunos de los criterios más comúnmente
utilizados son los siguientes:
Gráficos:
o
Región:
Comunidades Autónomas, zonas Nielsen, etc.
o
Hábitat:
rural o urbano, centro o periferia, etc.
o
Tamaño
de la población
Demográficos: edad, sexo, tamaño de
la familia, ciclo de vida familiar, renta, categoría socio- profesional,
educación, religión, nacionalidad.
Psicográficos: clase social, estilo
de vida, personalidad.
Comportamiento:
o
Ocasión
de compra: compra regular, esporádica, nunca, etc.
o
Tipo
de usuario: antiguo usuario, usuario regular, usuario potencial, no usuario,
etc.
o
Tasa
de utilización: nunca, baja, media, fuerte.
o
Estadio
de compra: desconoce el producto o servicio, lo conoce, está informado, etc.
o
Actitud
ante el producto o servicio: entusiasta, positiva, indiferente, negativa,
hostil, etc.
Los beneficios
identificados:
se trata de subdividir a los compradores en función de las ventajas que esperan
obtener de un producto o servicio completo. Así, por ejemplo, determinados
consumidores comprarán un alimento por el precio, otros por la comodidad de
preparación, otros por el sabor, etc.
Estrategia de
posicionamiento:
se puede optar entre:
·
La estrategia no diferenciada: la empresa va a
dedicarse a servir de la misma forma a todo el mercado, sin realizar ningún
tipo de especialización o concentración en algún segmento o mercado-objetivo
concreto.
·
La estrategia de diferenciación: especialización de
la empresa en algún aspecto que la haga única y que sea valorado por la
totalidad del mercado: conseguir el liderazgo en calidad, en tecnología, en
innovación, en servicio, etc.
·
La estrategia de concentración: la empresa, al no
disponer de los recursos suficientes que le permitieran atender a todo el
mercado, va a servir sólo a uno o a unos pocos segmentos del mismo, en los
cuales puede mantener alguna ventaja competitiva (ya sea en calidad, en precio,
en distribución, etc.).
Plan
de acción
Toda la información recabada permite
responder a preguntas tales como: ¿dónde estamos? ¿a dónde queremos ir? o ¿cómo
llegar ahí?. El plan de acción comercial define los medios y las acciones
operativas necesarias para responder a la última preguntas; incluye la
descripción del mercado o mercados en donde se pretende actuar, los objetivos
de ventas por cada uno de los mechados y/o productos, las acciones que habrá
que poner en marcha para que no se queden en meras directrices (que es
precisamente lo que son las estrategias: directrices para la acción). En
definitiva, en el plan de acción se debe definir cuál va a ser el público
objetivo, así como las 4 variables del marketing –mix: producto/servicio,
precio, distribución y promoción, detallando las acciones que habrá que poner
en marcha para cada una de ellas:
Producto/servicio: El producto es el
elemento esencial del marketing- mix. Sus elementos fundamentales son: su
calidad, sus características, marca, tipos de empaquetado y diseño, y servicios
relacionados.
La totalidad de estos elementos deberá estar
orientada a satisfacer las demandas del mercado, es decir, a complacer deseos
de los individuos que lo integran; estos deseos actúan como motivadores de la
acción de compra. Los individuos buscarán en el mercado hasta satisfacer esas
necesidades, lo cual incluye componentes tanto de orden físico como social o
psicológico. Muchas de estas necesidades pueden ser suscitadas a través de
oportunas acciones de marketing- mix.
Hay productos industriales y productos de
consumo. Los industriales pueden ser finales (bienes producidos que sirven para
producir otros bienes: edificios, maquinaria, bienes de equipo, etc. ) o
intermedios (dirigidos al consumidor industrial). En cuanto a los servicios,
pueden ser empresariales (sus clientes son empresas) o personales (sus clientes
son personas).
A la hora de definir el producto/servicio es
necesario:
o
Describir
las líneas de productos o servicios que ofrece y las características
fundamentales de los mismos.
o
Comparar
los productos / servicios con productos / servicios competitivos.
o
Analizar
si las necesidades que pretenden satisfacer sus productos / servicios están ya
satisfechas por otros productos / servicios.
o
Reflexionar
sobre: ¿los productos / servicios son distintos de los que ya existen en el
mercado?; en caso afirmativo ¿cuál es la novedad?; ¿qué ventajas aportan?.
o
Considerar
que resulta conveniente contar con elementos innovadores que los diferencien de
la competencia; examinando este aspecto cuidadosamente y siendo precavido si se
quiere hacer algo demasiado original (es sumamente arriesgado).
o
Tener
en cuenta que si el producto / servicio tiene éxito la competencia reaccionará
sacando otros similares, por ello resulta necesario planear la diferenciación
futura del producto / servicio o el desarrollo de otros nuevos.
La diferenciación puede venir como
consecuencia de la naturaleza del producto o servicio que va a realizar, del
proceso que utilice en su elaboración, de la técnica de venta que aplique e
incluso de otras prestaciones que ofrezca - garantía y el servicio post-venta
son especialmente importantes para determinados bienes- y para verificarlo debe
analizar, observar, estudiar y aprender de aquellos que realizan actividades
similares a la suya o bien vender productos u ofrecer servicios substitutivos.
Hay que tener en cuenta que los competidores
ya están en el mercado, y que muchas de sus actuaciones en cuanto a productos,
precio, distribución y promoción, han pasado, y están pasando el examen del
mercado.
Si se estima necesario, se puede imitar a la
competencia en aquello que hayan tenido éxito, pero tratando de diferenciarse
en algo; reunir la máxima información que pueda sobre ellos y estudiar su
publicidad, sus productos y sus estrategias, y pensar que ellos están
trabajando duramente por mantenerse en el mercado, lo que les exige un esfuerzo
para estar al día y adaptarse continuamente a los cambios, a fin de satisfacer,
conservar o incrementar una clientela cada vez más consciente del valor de
intercambio de su dinero, de su esfuerzo y de su tiempo.
Precio: Se trataría de
definir la estrategia de precios más adecuada para la empresa así como el
sistema de cobro que la empresa utilizará frente a los clientes.
El precio de un producto puede fijarse a
partir del coste de fabricación o de acuerdo al mercado:
o
A
partir del coste de fabricación: el punto débil de este sistema es que ignora
el volumen de demanda. La solicitud de un producto o servicio determinado por
parte del mercado debe siempre tenerse presente al fijar su precio.
o
A
partir del mercado: la forma ideal de fijar el precio será conocer lo que el
cliente está dispuesto a pagar por el producto, pero esto no es más que una
utopía que, además, dará pie al juego de los regateos, poco aconsejable para la
estabilidad del bien ofertado.
Más fácil resulta conocer lo que el cliente
exige a un producto o servicio y partir de ese conocimiento, fijar el precio en
cuestión. Si se comparan las características de dos productos similares con
precios diferentes, se observará que el de precio más alto justifica el
incremento acreditando el empleo de materiales de mejor calidad, diseño y
técnica novedosa. Por esa serie de conceptos un segmento de clientes está
dispuesto a pagar más. Inevitablemente, el precio afecta a la demanda.
Puede optarse por fijar un precio alto con
opción a descuento o fijar un precio ajustado para vender más, aunque sea a
costa de obtener menores beneficios. Resulta muy eficaz observar la reacción de
la demanda ante la rebaja en el precio de un producto en un porcentaje
determinado: si las ventas crecen en la misma proporción se sabrá que se
trabaja con una demanda elástica, si no es así, la demanda podrá calificarse
como inadaptable.
El propio producto, sus circunstancias y el
comportamiento de la demanda, así como los objetivos de beneficio que se
persigan serán los factores determinantes a considerar a la hora de establecer
la política de precios.
Cabe señalar las siguientes estrategias de fijación de precio:
o
Coste
más margen.
o
Valor
de mercado.
o
Precios
altos. Se paga novedad y puede aplicarse si: El producto o servicio es único o
está bien registrado. Es difícil de fabricar. El mercado es pequeño para atraer
competencia
o
Precios
bajos de salida: provocan una rápida expansión del producto o servicio, pero
son peligrosos si los competidores son fuertes y reaccionan.
o
Precios
disuasorios: precios muy bajos para disuadir a la competencia de entrar en ese
mercado.
o
Reducción
promocional: precio de salida bajo, como reclamo para que los clientes conozcan
el producto y se animen a seguir comprándolo a su precio normal, más elevado.
Distribución: consiste en intentar
tener y hacer llegar el producto o prestar el servicio adecuado, a la persona
indicada, en el momento justo. Para ello debe elegirse cuidadosamente los canales
de distribución más adecuados. El tipo de canal más idóneo se deduce del
mercado elegido, de los condicionantes de la empresa y de las normas de
distribución del sector.
Formar una red de ventas adecuada no es fácil
y más en la etapa inicial de una empresa. Es difícil encontrar vendedores
experimentados que quieran trabajar en la empresa e igualmente sucede con los
representantes o agentes comerciales y distribuidores; son los primeros
clientes a los que hay que convencer.
En la etapa inicial del empresario debe ser
el primer comercial de la empresa. La tarea de ventas recaerá en importante
proporción sobre él o sobre otra persona del equipo promotor, si son varios los
promotores del negocio, por tanto necesita prepararse adecuadamente para esta
tarea. Cuando resulte necesario contratar comerciales, además de seleccionarlos
cuidadosamente habrá que motivarlos, ya que la venta es pieza clave en la
empresa, y deberá de cuidarse también la comunicación con ellos, pues tienen
una información directa del mercado que será indispensable para el desarrollo
del negocio.
Por otro lado, pensar que la exportación no
está registrada a las grandes empresas: diariamente pequeñas empresas de
nuestro país se inician en ello. Europa es ya nuestro mercado y quizá la
empresa tenga un producto de gran éxito fuera de nuestras fronteras. Es
necesario informarse y asesorarse.
Por último, el transporte tiene una
incidencia fundamental en un negocio y no suele prestársele la debida atención.
Hay que considerar qué medio de transporte se adapta mejor, tanto a las compras
como a las ventas, analizando su capacidad y tarifas. En la elección debe
tenerse en cuenta la seguridad que ofrece en el traslado de la mercancía y en
las operaciones de carga y descarga y manipulación de la misma, así como la
regularidad y puntualidad del servicio y en la cobertura del riesgo de la
mercancía.
Promoción: no basta con tener
un hueco en el mercado, es necesario informar a los compradores tanto del
producto/servicio como de las acciones comerciales. Habrá que:
o
Definir
la imagen por la que se quiere que la empresa sea conocida. ¿Qué es lo que se
desea hacer prevalecer? Puede ser el saber hacer técnico, el trabajo bien hecho,
las posibilidades de flexibilidad comercial, su capacidad constante de
innovación, etc. Debe recordarse a este respecto que la primera imagen que da
la nueva empresa es, a menudo, la más duradera.
o
Analizar
los distintos mecanismos que pueden ser utilizados para dar a conocer el
producto o servicio: oferta directa, teléfono, publicidad por anuncios, correo,
radio, televisión u otros.
o
Valorar
las acciones de soporte informático a través de la asistencia a ferias,
congresos, conferencias técnicas y de expertos sobre el producto o servicio del
que se trate. Es preciso tener una especial sensibilidad para tener informados
de la actividad de la empresa a los líderes de opinión entre el segmento de
mercado que se ha escogido y a aquellas personas clave que influyen en el
proceso de toma de decisiones para el consumo.
Se recomienda describir los medios y sistemas
de publicidad que se van a utilizar para ganar mercado y para dar a conocer el
producto/servicio.
Presupuesto
del Plan de Marketing
En este apartado habría que recoger todos los
costes o aportaciones económicas de las acciones contempladas en el plan
(costes de publicidad, promoción, relaciones públicas, etc.) Asimismo, hay que
tener en cuenta la estrecha relación que debe tener la fijación del presupuesto
de marketing con la previsión de ventas y con lo que va a producir en términos
económicos dicho plan si se ponen en marcha todas las acciones en él recogidas.
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